miércoles, 21 de marzo de 2007

Vaut mieux vivre avec des remords qu'avec de regrets?


Hace años que escuché esta frase de una canción de Patrick Bruel. Y me ha llamado la atención mucho tiempo, pensando si era efectivamente mejor vivir con remordimientos que con arrepentimientos. Me preguntaba cual era la diferencia entre ambos sentimientos, lo que implicaba cada cosa....
Hoy creo saber la diferencia. Ambos tienen en común el sentimiento de culpa, tanto si estás arrepentido, como si tienes remordimientos, la culpa lo invade todo. Ahora bien, ¿qué los distingue? son casi opuestas diría yo. El remordimiento implicaría una concienciación de haber actuado mal, mientras que el arrepentimiento implica un cambio total de mente, de aborrecer por decirlo de algún modo lo que se ha hecho. Uno se arrepiente profundamente de haber hecho algo, y desea que nunca vuelva a ocurrir, en cambio el remordimiento es superficial, y aunque nos sentimos culpables y pidamos perdón volvemos a actuar del mismo modo en futuras ocasiones.
Creo que en nuestra mayoría tenemos remordimientos, pero pocas veces nos arrepentimos verdaderamente de nuestra actuación. Aun así, cuando se tienen remordimientos, es seguro que se ha actuado de una manera que en conciencia no ha sido la correcta, pero el arrepentimiento no creo que siempre sea por haber actuado mal y tomar conciencia de ello y desear cambiar para que no vuelva a ocurrir, a veces el arrepentimiento es precisamente por no haber hecho algo.
Echar la vista atrás y pensar en esto y en aquello que dudamos de hacer o dejar de hacer y optamos por no hacerlo y visto con distancia nos parece que tal vez hubiéramos tenido que ser más valientes y no tener miedo al remordimiento en la memoria, para no tener que arrepentirnos ahora.
En fin, ahí queda eso, remordimiento o arrepentimiento?

martes, 6 de marzo de 2007


Gabriel García Márquez ,Gabo, cumplióayer 80 años (nació el 6 de marzo de 1927). Y además se cumplen, este mes de marzo, 60 años de la publicación de "Ojos de perro azul", su primer relato; 40 de la publicación de "Cien años de soledad" y 25 desde que recibió el premio Nobel de literatura. No hacer mención a ello, sería algo imperdonable.

Recuerdo leer Cien años de soledad hace más de diez años, y recuerdo como me fue imposible leer otra novela en muchísimo tiempo. La maestría como el mundo real y el de ficción se entremezclan en Macondo, la forma de relatar el nacimiento, desarrollo y decadencia del pueblo y de la familia Buendia, me dejó exhausta.

Recuerdo a Melquíades trayendo un jarabe que curaba la peste de la memoria. Aquella peste que curaban poniendo etiquetas en las cosas hasta que olvidaron leer. Recuerdo el miedo al incesto, pues podría salir un bebé con cola de cerdo, recuerdo a la matriarca Úrsula que murió cuando terminaron las lluvias...

Es difícil encontrar a alguien que no haya leído al menos algún relato de García Marquez, El coronel no tiene quien le escriba por ejemplo, su lenguaje sencillo permite llegar a multitud de lectores. Y tan dificil es encontrar a algún escritor que reconozca sus influencias como encontrar multitud de relatos escritos siguiendo su realismo mágico.
Dicen que es vanidoso, que sabe lo que vale...tampoco tendré el placer de conocerle personalmente, y, lo único que importa son sus novelas. Volveré a leer su obra maestra, y tal vez, El amor en los tiempos del cólera, su novela de amor que esperas que nunca termine. Y de hecho, mientras sus obras perviven en nuestra memoria nunca acaban de terminar.